ECONÓMICA
Llegué al cargo en 2014 con la FERugby al borde de la quiebra, con una deuda de casi dos millones de euros y demandas por impago. La salvamos, mi equipo y yo, de la desaparición a la que parecía condenada. Con el aval de World Rugby, logré un préstamo del CSD de 450.000 euros y otro del Banco Sabadell de 500.000 y, gracias a una política de reducción de gastos y de incremento de ingresos, especialmente de patrocinadores, en septiembre de 2019 salimos del Plan de viabilidad del Consejo Superior de Deportes en la mitad del tiempo previsto.
Hemos terminado la legislatura amortizando los préstamos cuatro y dos años antes de su vencimiento, respectivamente y todo ello sin disminuir las actividades de preparación y de competición de las distintas selecciones nacionales. Al contrario, se incrementaron en todas las categorías, especialmente en días de concentración y en nuevas programaciones de actividades. Además, se mantuvo todo el personal sin reducción de salario. Al cierre del ejercicio 2019 existe un fondo de maniobra positivo de 450.000 euros. El presupuesto de la federación ha pasado de 2.900.000 de euros en 2014 a 5.000.000 de euros en 2019, con un incremento de más del 72%.
